Analistas políticos de Estados Unidos han afirmado a través de diversos estudios que más de la mitad de los miembros del Congreso estadounidense derrochan a costa de los impuestos que paga el pueblo de esa nación norteamericana.

El abogado, escritor, activista político y bloguero estadounidense, Michael T. Snyder, publicó un artículo citado por Russia Today donde se enumeran al menos 21 formas que tienen los políticos estadounidenses de disfrutar de la buena vida mientras el país está a punto de perder su credibilidad financiera.

De esta manera, Snyder describe que los servicios de peluquería han costado a los contribuyentes cerca de 5, 25 millones de dólares en el transcurso de 15 años, mientras exista la posibilidad de que el Tesoro de EE.UU. entre en quiebra en el mes de octubre.

Otras de las formas de gastar el dinero, fue el pago de más de 40 mil dólares al empleado que trabaja de limpiabotas en el último año fiscal, mientras que seis barberos recaudaron más de 40 mil dólares cada uno, incluyendo cerca de 80 mil dólares para al barbero encargado.

Estos no solo son los casos presentados por el analista, sino que menciona que sorprendentemente, los 50 miembros más ricos del Congreso tienen un patrimonio neto de 6,14 millones de dólares y más de la mitad de los que «sirven al pueblo de Estados Unidos» en el Congreso son millonarios.

Entre otros de los derroches, la agencia Russia Today manifiesta que un promedio de 4 millones de dólares de los contribuyentes de EE.UU. se destinaron a gastos «de oficina» y «personales» de senadores.

Además de ello, el gobierno de EE.UU. gasta aproximadamente 3,6 millones de dólares anuales para financiar los lujosos estilos de vida de expresidentes como George W. Bush y Bill Clinton.

De igual modo, se estima que el viaje que la familia Obama que llevaron a cabo a África costó a los contribuyentes estadounidenses alrededor de 100 millones de dólares.

En resumen, Michael T. Snyder, afirma que el pueblo estadounidense es quien paga todo el despilfarro que por desgracia hace luchar duramente a las familias para pagar los impuestos.

Analistas han afirmado que la desigualdad social en EE.UU. ha estado creciendo desde hace casi tres décadas. Este crecimiento aumentó drásticamente el año pasado cuando los ingresos del uno por ciento más rico del país aumentó el 19,3 por ciento, la máxima desde 1928, mientras que el aumento de ganancias para el 99 por ciento de la población restante fue solo del uno por ciento.

Los estadounidenses más ricos fueron duramente golpeados por la crisis financiera. Sus ingresos cayeron considerablemente durante la Gran Recesión de 2007-2009 debido a que se desplomaron los precios de las acciones en Wall Street.

Pese a la crisis que afecta a las ciudades y sus ciudadanos, el diario político The Hill publicó la lista anual de los legisladores estadounidenses más ricos, encabezados por el legislador republicano por California Darrel Issa.

De acuerdo con este periódico, Issa tiene una fortuna de unos 355 millones de dólares. El legislador supera a su colega de Texas Michael McCaul. Su fortuna está estimada en al menos 101 millones. Algo que contrasta con el devenir de los ciudadanos estadounidenses.